Uno de los detenidos el miércoles por presunto consumo y tráfico de pornografía infantil sería profesor de educación física y enseñaría en una escuela pública y en dos colegios privados.

Este es uno de los tantos datos que van saliendo a la luz luego de que la Justicia detuviera hace 48 horas a dos hermanos, en una vivienda de Crisóstomo Alvarez al 1.500.

“Queremos saber si algunos de los escenarios que figuran en las fotos habrían sido utilizados para producir fotografías con menores”, esgrimió el fiscal de Instrucción Penal de la V Nominación, Washington Navarro Dávila.

Esta tarea fue encomendada a los peritos de la Policía Federal. “Ellos comprobarán si de las cámaras fotográficas secuestradas fueron tomadas las fotografías que aparecen en las computadoras secuestradas”, aseguró.

“Nos llevará tiempo, pero si detectamos que un solo menor fue fotografiado por los detenidos, estaríamos también ante el delito de corrupción de menores”, advirtió.

Ayer a la tarde, los detenidos prestaron declaración y “negaron toda vinculación con el hecho que se investiga”, sostuvo el funcionario judicial.

“Es una pesquisa muy meticulosa. Secuestramos 19 elementos durante el allanamiento de ayer (por el miércoles). De un solo archivo de las carpetas del software que detectamos, imprimimos más de 1.000 imágenes”, detalló Navarro Dávila.

Otros datos curiosos que reveló el fiscal son que debajo de la plantilla de una zapatilla secuestraron un pen drive y qye en una de las habitaciones encontraron “cinco gramos de marihuana”.

Entre las más de 1.000 fotografías que se encontraron, “aparecen bebés, niños y adolescentes de ambos sexos que “no llegan a los 15 años”, aseguró el funcionario judicial.

Navarro Dávila recibió la causa y realizó una serie de allanamientos en marzo del año pasado. “Entonces se secuestraron dos computadoras, cámaras fotográficas, pen drive y un celular, recordó el subcomisario César Agüero, jefe de la División de Delitos Telemáticos y Económicos de la Dirección General de Investigaciones y Delitos Complejos.

La semana pasada llegó a nuestra provincia una delegación de la División Delitos Informáticos de la Policía Federal, al mando del subcomisario Víctor Chanenko.

“Ellos cuentan con un software avanzado que permite contactar los discos rígidos y en cuestión de 48 horas pueden determinar si en esa unidad de almacenamiento existen fotografías o correos electrónicos”, indicó Agüero.

“Cuando se levanta evidencia del software digital lo podés contaminar si no utilizás el sistema correcto y la prueba puede caer”, explicó el subcomisario.

Otra etapa de investigación gira en torno de saber si los detenidos “distribuían” fotografías de pornografía infantil.

“Si logramos comprobar que el LOG (registro oficial) de conexión de esa máquina tiene salida a otra IP (número que identifica a cada computadora), ellos también transmitían fotografías”, manifestó Agüero.